EMBALSE DE NAVACERRADA

El pasado sábado estaba “encerrado” en casa con mi catarro. Algo me faltaba. Estaba cayendo la tarde. Pues mejor! Cogí mi camara de fotos y el coche.

Quería ir a cazar una puesta de sol en el horizonte, pero ¿a dónde?. Lo tenía claro, se me había metido en la cabeza desde hace semanas ir al embalse de Navacerrada y recorrerlo en su perímetro.

Desde allí se vería una vez más la mole de roca granítica de la Maliciosa. Sabía que los últimos rayos de luz podrían posarse en esta gran efigie. Era la cuarta vez en los últimos meses que fotografiaba su silueta.

Pero el sol caprichoso se escondía detrás de los nubarrones y solo tocó con alguno de sus rayos y por poco tiempo el pueblo de Navacerrada. Apreté el disparador tantas veces como pude para que no se me escaparan.

El resultado de toda esta cacería detras de la luz y de las siluetas se puede observar en las fotos.

No me dió tiempo a dar la vuelta al embalse pero volví a Madrid satisfecho de haber visto a la silueta de mi querida sierra de Guadarrama. Porque era lo que necesitaba, escaparme a la sierra.

El próximo fin de semana subo alguna montaña, ¿quién se viene?

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